Por Lilia Esmeralda Calderón Almerco
Dime, mamá ¿qué te parece la luna en el cielo?
Me parece una bola de algodón o una pelota de fuego.
Me parece una bola de algodón o una pelota de fuego.
Mamá, ¿quién habita en la luna?
Una señora bella como ninguna.
Una señora bella como ninguna.
¿Por qué siempre está ahí? ¿Por qué no baja?
Porque todo el tiempo ella trabaja.
¿Y qué hace con tanto empeño?
Teje ropa para los ángeles del cielo.
Teje ropa para los ángeles del cielo.
Pero, mamá, ¿es que ella no descansa?
No, los que viven en el cielo no se cansan.
No, los que viven en el cielo no se cansan.
Mamá, yo quiero vivir en la luna bella.
Claro que sí, pero ahora vete a dormir y a soñar con ella.
Claro que sí, pero ahora vete a dormir y a soñar con ella.