miércoles, 26 de febrero de 2020

LA BRUJITA DE BRA BRE BRI BRO BRU



Era una brujita bromista, llamada Brujilda
que brincaba en los techos y venía de muy lejos,
del mágico país de Bra-bre-bri-bro-bru.

Aquella noche de luna y azul,
brujita Brujilda salió de paseo
a mirar la luna que brillaba en el cielo,
canturreando las notas del Bra-bre-bri-bro-bru.

Emprendió su camino y soplaron los vientos.
brujita Brujilda se puso un abrigo de fino bramante
y una bufanda bruna de lo más elegante.

Siguió su camino y la lluvia asomó.
Brujita Brujilda se puso un sombrero de paño de lana,
y un paraguas muy propio de las más finas damas.

Para ir en busca del tibio sol y la fresca brisa,
brujita Brujilda alistó su equipaje
y se fue despidiendo del brusco paisaje.

Después de un abrazo, abordó su escoba,
y con su sombrero de moda,
se elevó con gracia por el cielo azul
de regreso al país de Bra-bre-bri-bro-bru.