Hola, soy Irgeo, una arañita joven y soñadora,
de aquellas que también sueñan despiertas. Te contaré que me gusta el invierno,
excepto la lluvia, por ello, en esta época solo salgo con
paraguas, y cuando me quedo en casa me dedico a leer y a tejer mi telaraña.
Un día cualquiera, yo estaba en el techo de mi casa,
en compañía de unas amigas. Conversábamos, reíamos y tejíamos. Yo hacía una telaraña
moderna que estaba copiando de una revista de tejidos para arañas. De pronto, miré hacia arriba y vi pasar un
ave volando hacia lo más alto del cielo, y es entonces cuando...
Yo tenía dos alas de color azul y estaba en el
aire, volando entre las nubes y girando con el viento. Desde muy lejos veía los
techos de las casas y a mis compañeras tejiendo sus telarañas. Qué feliz me
sentía, y pensé que volvería cuando quisiera y bajaría volando hasta la escalera
de mi telaraña.
De pronto, la risa de mis compañeras me volvió
a la realidad y descubrí que había dejado escapar varios puntos de mi tejido. ¡Mi
tela estaba hecha un desastre! Inmediatamente, traté de arreglarla, pero en ese
mismo instante, un ventarrón seguido de una lluvia copiosa me arrebató el tejido.
dejándome en medio de un gran charco de agua. Me quedé sin tela, pero sin
sueños, no.